viernes, 1 de octubre de 2010

VIVENCIAS DE LOS PARTICIPANTES


En la ceremonia de apertura del vórtice del Corazón de la Tierra en Medellín, Colombia, el 24 de febrero del 2010.


Me llevo conmigo un gran sentimiento de gratitud por todo lo vivido, por poderlo vivir en primera persona, por poder sentir la presencia de la tierra, del agua, del viento y del fuego de una forma tan especial, y de los diferentes reinos vegetal, animal, mineral, por haberlo compartido con seres de muchos países, y sobre todo porque creo que solo es el inicio y continuación de un largo proceso.
Pero si hay algo que de verdad me ha emocionado es comprobar que los que participamos en esa ceremonia allí o aquí seguimos unidos profundamente por unos lazos sutiles pero muy fuerte y que la transformación se ha operado en cada uno de nosotros de alguna manera. Gracias de corazón.

Pilar. Cáceres


Toda esa MAGIA me llegó como una sensación amorosa que cuesta poner en palabras. ¡Tan extensa, tan profunda, tan diferente a todo lo sentido antes!

Entre todos lo conseguimos, nuestros corazones generaron la energía necesaria, la Energía de la Tierra fluyó y todos los que estábamos conectados la sentimos.
Y aunque la “razón” y los “conocimientos” que yo tenía hasta ahora me lo nieguen, lo cierto es que ocurrió y no puedo negar lo que sentí, lo que viví.

He tomado la decisión de vivir en esa y desde esa Energía cada día.
En esa Energía, en ese Amor, nos encontraremos amigos, ¡siempre!

Dulce. Barcelona

Yo lo hice con mi hijita de 6 años que me acompaño para la meditación fueron 10 minutos pero fue lo máximo. Gracias

Jr Marvila


Sentimos fuerte sobre todo el trabajo con el símbolo Aleph y fue bonito algunas reacciones en los días siguientes con relaciones con las que había algún conflicto, se disolvieron de corazón.

Dario. Madrid


Ahora veo la labor hecha, como hemos llevado el mensaje a tantas personas que han vivido el 24 de febrero a través de sus corazones, cada una a su ritmo y en libertad, acompañándose de la magia del Universo.
Y esto es el principio de lo que ya estaba aconteciendo, que vamos a ser cada vez más porque los guerreros trabajamos y seguiremos empeñados en tender una mano a quien quiera acompañarnos en este fabuloso viaje.
Os doy gracias a todos los guerreros de luz, de corazón a corazón, seguimos adelante con más fuerza si cabe. Gracias a los niños, a todos los peques que también estuvieron presentes el 24, ellos son nuestro testigo y ellos ya lo saben todo, todo, nacen con todo esto ya sabido. Escuchadles siempre.

Ana Guerrero Madrid



!Qué energía!, qué unión, qué impactante!. Hasta el escucharlo nuevamente me hace sentir en el mismo lugar, el mismo espacio, la misma esencia, se te va el tiempo. Gracias mil por insistir en que TENIA que estar en Medellin!

el Camino con corazón se hace caminando, nos vemos en el Camino!

Kiran, Puerto Rico

¡Hola,aah! que experiencia tan bonita!yo estuve sola pero con la presencia de mis dos hijos que dormían a mi lado. Empecé a sentir presencias que me acariciaban y tranquilizaban,que estaban ahí conmigo,con nosotros,sentí que fueron también cerca de mis hijos y trabajaban para ellos. Estaba increíblemente en compañía y qué compañía.

Valentina


Era una energía tan amable, tan dulce que casi perdimos la concentración dejándonos llevar por tan maravillosa experiencia. Nos abandonamos a esa caricia y sentimos la fuerza creadora de la energía que subía desde el suelo por nuestros pies, hasta rodear todo el cuerpo. La sensación solo era comparable a ese momento de llegar a casa, tras un largo periodo y sentir el amor de tu madre rodeándote con sus brazos y depositando un suave beso en tu mejilla, ese lugar donde te encuentras seguro, segura, y donde sabes que nada ni nadie te puede hacer daño, donde solo hay AMOR.

Nunca olvidaré ese momento.

May. Jerez


Fue la unión de nuestras intenciones y corazones lo que nos permitió conseguirlo. Los seres humanos tenemos mucha más fuerza y poder de lo que solemos creer y más si nos unimos... Vi rayos de luz intensa que nos atravesaban y se potenciaban según iban atravesándonos. Y ya con una consistencia casi líquida la luz rosa anaranjada salpicada por chispas que revoloteaban a nuestro alrededor iba concentrándose concéntricamente en el centro para caer allí de una forma lenta pero imparable hacia el centro de la tierra. Cuando llegó al núcleo del planeta la energía volvió a surgir como una erupción de rayos de luz blanca que salían ya no sólo del centro sino de todo el recinto, rompiendo la superficie terrestre y expandiéndose sin límites. Una sensación de poder y al mismo tiempo de serenidad infinita me invadió.

Laura. Valladolid


No tengo palabras para compartir lo que a partir de ese momento, siento. Es como si estuviera muchísimo más receptiva, en cuanto a lo que experimentan los demás. Y lo que yo experimento es, como si se hubiese abierto una ventanita por dónde percibo algo tan normal y natural, que lo difícil sería explicar como antes no podía sentirlo. Simplemente es que todos somos uno, sintiendo que todos somos uno. Y que todos estamos "en el mismo lugar" estemos donde estemos !!!!!!!!!
Carmen Manzanares. Vic, Gerona

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